La cabeza de su gemelo siamés se balancea en el aire.

Ser gemelo siamés siempre me había parecido una verdadera pesadilla.

El impulsor descartable del Mariner XX decoraba su casco como un gemelo siamés subdesarrollado.

Era como si la casa hubiera adquirido un gemelo siamés, pegado a ella por la puerta.

Al día siguiente, cuando tuviera el dinero, podría separarse de su gemelo siamés para siempre, se recordó Lyman.

Ahora tenía que vivir con ello, como con un gemelo siamés loco, por el resto de su vida.

Descubrirías que el perfeccionismo es el gemelo siamés socialmente aceptable de un sentimiento subconsciente llamado miedo a la mediocridad.

Estaban entrelazados, se habían convertido en gemelos siameses unidos por la cadera.

Es lo que los periódicos sensacionalistas de supermercado describen como gemelos siameses.

Sabía que sus respectivas carreras estaban ligadas; eran gemelos siameses en política.

También recuerda unos gemelos siameses que vio una vez en la calle-

El guerrero de la franja de cabello mató a los gemelos siameses.

Esta relación es la de gemelas siamesas: son funcionalmente inseparables pero mutuamente contraproducentes.

Las pompas envolvían todo, también a tres gemelas siamesas unidas por las manos.

Nos envolveríamos los dos con ella, como los gemelos siameses de tu cuento.

Luego cortan, por suerte, y pasan a la historia de las gemelas siamesas.