1
Otto Gruber abrió las cortinas del palanquín al oír una tremenda explosión.
2
Durante el día, no obstante, protegida por las cortinas del palanquín, se desahogaba.
3
Descorrió las cortinas del palanquín, descubriendo a Iyatil en el interior.
4
Con el rabillo del ojo detectó un temblor en las cortinas del palanquín.
5
Echando a un lado las cortinas del palanquín, Ibn Jad empujó a Mateo hacia adelante.
6
Arius se encogió de hombros mientras Gallo cerraba las cortinas del palanquín tirado por bueyes.
7
Habían bajado todas las cortinas del palanquín excepto una.
8
Las cortinas del palanquín del Emperador se abrieron.
9
Las refulgentes cortinas del palanquín se apartaron.
10
Se apartaron las refulgentes cortinas del palanquín.
11
Las cortinas del palanquín se movieron débilmente.
12
Por fin, la mano le soltó las ropas y se deslizó de nuevo tras las cortinas del palanquín.
13
Al cabo de un rato, gruñó una orden y se descorrieron las cortinas del palanquín, para que pudiera ver.
14
Las cortinas del palanquín estaban corridas; nada se movía allí, pero él sabía que "ella" estaba dentro aguardándolo.
15
Sogamori, en lugar del Emperador, hizo una imperceptible seña con la mano y dos cortesanos cerraron las cortinas del palanquín imperial.
16
Las cortinas del palanquín prendieron y las lenguas ardientes se esparcieron por el techo y el suelo, devorando con rabia cuanto encontraban.
