La emboscada la llevaron de calle según la estrategia, pero acencerrostapados.
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Seguimos en silencio hasta la tasca donde el Comendador, acencerrostapados, me esperaba.
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Se mudaron acencerrostapados una noche.
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Como que según dicen, al amo le ciega los ojos, y allá acencerrostapados hace él su negocio.
6
Jamás pisé una tasca salmantina, ni recibí de tapadillo a una prostituta, ni rondé rejas, ni anduve acencerrostapados.
7
Yo no recuerdo haber visto algunas nunca abiertas; los señores salen y entran por las puertas de servicio, acencerrostapados.
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Las mujeres de su vida habían sido soldaderas, o aventuras acencerrostapados con mujeres ordinarias, rápidamente deslumbradas por su histriónica fachenda.