1
La Japonesita dio vuelta al tornillo para quitarle luz al chonchón.
2
Es el chonchón... bah, está picado porque no lo dejé hacer nanay conmigo.
3
La achicó hasta dejarla convertida apenas en un punto en el pico del chonchón.
4
Apenas un par de dedos colorados, en el fondo, donde se multiplicaba la llama del chonchón.
5
Luego encendió un chonchón y se asomó a la pieza de su hija: Malarrosa dormía plácidamente.
6
La Japonesita apagó el chonchón.
7
Algunos chonchones de carburo correteaban las sombras hacia los rincones del bodegón.
8
Era válido incluso que Chonchón los llamase, en caso de duda de los merodeadores.
9
Y se hizo un silencio que rompió Chonchón al preguntarse:
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Pero miró a Pancho, y juntos lanzaron unas carcajadas que casi apagaron los chonchones.
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Sobándose las manos caminó entre las mesas apagando, uno por uno, todos los chonchones.
12
Sentados ya ambos plomos con Chonchón, éste abandonaría de improviso la mesa con una excusa cualquiera.
13
Dios no puede permitir tanta maldad -dijoChonchón.
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Acordaron apostar un señuelo y se llegó a la certeza que Chonchón sería quien despertaría menos sospechas.
15
Les ha dicho que no le gusta que enciendan tantos chonchones cuando hay poca gente, no sale negocio.
16
-Patrón ,patroncito ,alláafuera andan la perra amarilla y el chonchón...