1
Marcia Overstrand había aparecido en mitad de la trampa del custodio supremo.
2
Una trampa urdida por el custodio supremo y la Oficina de Raticorreos.
3
El custodio supremo se sentó y la contempló con sus pálidos ojos.
4
Pero el proyecto más interesante que ocupaba al custodio supremo era Simón Heap.
5
Hizo un chiste sobre el custodio supremo y se llevaron a sus hijos.
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Enseguida el custodio supremo fue levantado de su cama por segunda vez consecutiva.
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Y estaba firmado nada menos que por el custodio supremo.
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El custodio supremo fue a sentarse al tocador de señoras a pensar un rato.
9
Al custodio supremo le gustaba que le suplicaran un poco.
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La primera regla de la lista era no confiar en nadie, decía el custodio supremo.
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El custodio supremo también aguardaba el regreso de Stanley.
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El custodio supremo era un hombre sutil y se intentaba ganar la confianza de Simón.
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No era, le dijo al custodio supremo, el tipo de cosa que él hubiera hecho.
14
Estoy segura de que los dibujos que ha hecho le serán muy útiles al custodio supremo.
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Stanley no dijo nada, aun cuando sabía perfectamente bien que el representante era el custodio supremo.
16
Una vez, el custodio supremo enseñó a Simon la mazmorra número uno y nunca la olvidó.
