Les ofrece un cordero en tubilustro y eso paga cualquier exceso trompetero.
2
Filocles reapareció con su trompetero, el joven nabateo que se llamaba Rafik.
3
A su trompetero le corría sangre por el cuello; una oreja rebanada.
4
Ni Judith Haynes -dijoFen, sonándose la nariz con un estruendo trompetero-
5
Cuando volvieron a la tienda, Javier ya tenía preparado un canuto trompetero.
1
La posibilidad de poseer la receta del té de floripón, convence a Sofía.
2
Yo lo que necesito, doña Carmen, es hacerle otro té de floripón y escaparme.
3
Las tribus mezcaleras lo utilizaban y los aborígenes usaban el floripón dentro de un contexto religioso, refuerza el profesional.
4
Doña Carmen espera que haya buena luna; que el floripón haga efecto, que todo salga bien y Eulalia se manifieste.
5
Cuando el té de floripón está preparado, Samuel lo vierte en una vasija y le pone la tapa de barro.
1
También señaló las flores que solo abrían los pétalos por la noche, como un floripondioblanco.
1
Su voz retumbaba como la trompetadeljuicio final, rica y penetrante:
2
De pronto me estremecí como si hubiese escuchado la trompetadeljuicio final.
3
No, no volvería nunca, hasta que sonara la trompetadeljuicio.
4
MacIan no se sentó; estupefacto, asombrado, parecía haber oído la trompetadeljuicio final.
5
La voz de sor Inés se había abierto paso como una trompetadeljuicio final.
Uso de estramonios em espanhol
1
Oí hablar continuamente de hinojos y mastuerzos, rudas y ninfeas, estramonios y ruibarbos.
2
También había otras plantas menos amables, como los estramonios y las venenosas adelfas, mientras las abejas libaban por doquier.
3
Unos cuantos estramonios resplandecían, como arracimados y pálidos fanales, y la maleza era espesa y despedía un olor dulzón.
4
Aparqué al otro lado de la calle, frente a un terreno baldío lleno de resecos estramonios y zarzas intrincadamente entretejidas.
5
Ni rastro de dragones por ninguna parte, ni siquiera la punta de un ala oxidada que asomara entre los estramonios y las plantas de mostaza.
6
Capullos abiertos, fulgor en los estramonios, flores-de-acero irguiéndose azules de las matas que cubrían todas las colinas, tímida blancura de las no-me-beses en las cañadas.