1Euterio estaba conmigo cuando finalmente el tribuno golpeó la mesa y grité:
2Euterio me enseñaba el ceremonial de la corte tres veces por semana.
3El eunuco armenio Euterio me resultaba tan simpático como antipático Nicocles.
4Euterio asintió; sus pequeños ojos negros centellearon como los de una estatua egipcia.
5Euterio y yo quedamos solos en la cámara del consejo.
6Euterio se ofreció para llevar personalmente la carta a Constantinopla.
7Iba a preguntar el paradero del ejército de Galia cuando me encontré con Euterio.
8Ah, Euterio -añadiólenta y pensativamente- ,hazvenir también a Oribasio para una consulta.
9Y los terios, en dos infraclases: los metaterios (marsupiales) y los euterios (placentarios).
10Mientras entraba, Euterio decía con su tono más tranquilo.
11Por ahora somos nosotros, los mamíferos placentarios, los euterios, quienes definimos la profesión de mamíferos.
12Juliano me dijo que Euterio le informó que nunca había visto a Constancio tan furioso.
13Euterio, que estaba a mi lado, comentó: "Hasta los dioses quieren que seáis coronado".
14Mentí o, mejor dicho, me limité a decir parte de la verdad cuando Euterio me interrogó.
15Se llama Euterio; un eunuco que ya había estado a mi servicio cuando era un chiquillo.
16Los esfuerzos de Euterio y Salustio fueron en vano, mas no por la razón que imaginas.