Sentir que algo no va bien, o no es lo que parece.
1Monroy comenzó a olerse la tostada, una tostada que apestaba a quemado.
2Cuando pasaban dos horas, la señora comenzaba a olerse la tostada.
3Menos el santero, que debió de olerse la tostada y puso tierra por medio.
4Al amanecer, los rusos empezaron a olerse la tostada.
5Y con razón: era el de mi tío, a quien no le harían falta ni dos segundos para olerse la tostada.
6De pronto, se cabreó con Walsh, que apenas le había dado información, y aún más consigo mismo por no olerse la tostada.
7-Porqueagentes secretos del gobierno colombiano empezaban a olerse la tostada y se habían puesto a vigilar a Jarratt.