Yo no osé transgredir el primer círculo de la entrada.

Como un tabú sagrado que nadie más hubiera osado transgredir.

Lo que no osábamos transgredir era esa convención social rígida que la colocaba en un lugar aparte.

Daré un escarmiento tan terrible que nadie más osará transgredir la paz que he creado para todos los griegos.

¿Quién osaría transgredir la ley dentro de la ciudadela de Estigia?".

Si alguien osaba transgredir estas normas, él mismo iba en su busca, se enfrentaba con él y le expulsaba del Canadá.

El capitán lo cerraba con llave cuando no estaba en él, y Lurie, que tenía otra llave, no osaba transgredir la prohibición.