1
Fabiola buscó en su rostro signos de engaño, pero no vio ninguno.
2
Repitió la palabra, buscando en mi rostro signos de que le comprendía.
3
En algunos momentos me pareció notar en su rostro signos evidentes de desacuerdo y repulsión.
4
Ya no había en su rostro signos de desconfianza.
5
Vi que Claude buscaba en mi rostro signos que le indicaran de qué humor estaba.
6
Cuando apareciste de nuevo en la oficina, vi en tu rostro signos inconfundibles de honda preocupación.
7
Reconoció en su rostro signos evidentes de cansancio.
8
Se acercó más al espejo, luchando contra su repulsión, buscando en su rostro signos de locura.
9
No obstante, la mano de un Maestro había cincelado en aquel rostro signos de preocupación y dolor.
10
Massa escribía que muchos encontraban "en su rostro signos sibilinos de reconditeces misteriosos e indescifrables.
11
Aunque su tono denotaba autoridad y a la vez tolerancia, Sonea advirtió en su rostro signos de vergüenza.
12
Después paseó la mirada entre sus súbditos, sin que ninguno pudiera leer en su rostro signos de preocupación.
13
Cogió tierra empapada en sangre y con los dedos sucios se pintó en el rostro signos rojo oscuro.
14
Ella mostraba en su rostro signos de éxtasis, su respiración era corta y fuerte, su flexible cuerpo respondía.
15
Al terminar, ambos tenían en el rostro signos visibles de preocupación, como si la cosecha de ese año se hubiera agostado.
16
Corberán, por otra parte, mostraba en el rostro signos que hubiesen enorgullecido a su patrón, Zazzara, de estar buscando una explicación.
