Hablaba con un acento extraño, poco marcado para un extranjero auténtico, pero demasiado exótico para tener frenillo o no ser más que un cursi.

El embajador hablaba como si masticara piedrecitas, tuviera frenillo o fuera tartamudo.

Pues no: además tiene frenillo, aceleradorillo y embraguillo.

Y es que, Dios lo bendiga, tenía frenillo, y donde había una "r" pronunciaba "g".

Pensé que tendría frenillo en la lengua.

Yo ni siquiera sabía que tenía frenillo.

Tenía frenillo en la lengua.

Quizás lo que debas corregir es la postura, o revisar si el pequeño tiene frenillo que le impide el enganche adecuado.

Hablaba raro, como arrastrando las erres, pero no porque tuviera frenillo, sino como si el español no fuera su idioma natural.

-Porqueno tienes frenillo -contestóSharon.