Uno de los amasijos de carne destrozada contenía varios huesos de la mano.

Ahora tres kreelix humeantes yacían en el suelo en sendos amasijos de carne quemada.

Había manos, huesos, hígados, cerebros, y otros muchos amasijos de carne que Barrachina no conseguía identificar.

Los orkos que se acercaron como una nebulosa acabaron convertidos en amasijos de carne humeante y metal.

Sin pretenderlo, vio las articulaciones rotas, los huesos dislocados, los amasijos de carne putrefacta y tejidos consumidos.

Me imagino que aquello quedaría convertido en unos amasijos de carne...

Los pechos eran meros bultos sin pezones, como pálidos amasijos de carne pegados al tórax de un hombre.

Piensa en los amasijos de carne y hueso triturados que deja un tanque cuando aplasta a un hombre.

Mientras hablaba, Martinez había hecho pasar, tomándolas de lo alto del montón, tres fotografías que mostraban amasijos de carne abierta.

Pasando por encima de los amasijos de carne abrió despacio la puerta de la calle, acordándose de la vecina gritona.

A la izquierda del edificio había alineadas unas jaulas de malla metálica sobre plataformas elevadas que contenían unos amasijos de carne pálida.

Era increíble lo lejos que llegaba la sangre, en qué amasijos de carne se convertían aquellos miembros una vez descuartizada la víctima.

Al revivir la escena, Salomon olió de nuevo los amasijos de carne y sangre caliente mezclada con vino que le cayeron encima.

Las espadas cortaban y atravesaban a los híbridos sin reducir su velocidad, convirtiendo a los embrutecidos seres en amasijos de carne y sangre.

Se llevó la mano a la cara y trazó los amasijos de carne que le cubrían desde el ojo hasta la nariz y los labios.