1
Entonces Thora recordó el mentón afeitado del sacerdote, y su cabello tonsurado.
2
Aquello me indicó que las ropas y el cabello tonsurado no eran ilusión mía, como había deseado desesperadamente.
3
El monje tenía la barba muy rizada, cabello tonsurado castaño claro, como de paja vieja, ojos de color pizarra e igualmente duros... aunque reservados.
4
La corona castaña de sus cabellos tonsurados, sombra horizontal, contrasta con la palidez de su piel.
5
Mi amigo había enflaquecido un poco el último año, y sus cabellos tonsurados eran ahora enteramente grises.
6
Parecía hombre favorecido, gallardo bajo la casulla, y sus cabellos tonsurados en el colodrillo, al uso clerical, eran negros y fuertes.