En la calle de Caseros, frente al zanjeado de una quinta, había un casucho de tejas medio en ruinas.
2
Cuando ésta se asomó a su atalaya vio la puerta del casucho abierta y el horripilante cráneo sobre su pedestal libro.
3
Temiendo que fuesen gente de justicia u otras personas propensas a hacer mal, se acogió a un casucho ruinoso que había cerca de allí.
4
Setenta disparos penetraron el casucho a 715 metros por segundos: ni siquiera los tabiques resistieron..., y dejaron al descubierto el interior de la cabaña.
5
Cuando estuve allá la última vez, hablaba el alcalde de ponerle mi nombre a una calle y una lápida al casucho donde nací...
6
Salimos de la ferrería y pasamos por la Muedra, un lugar desierto con unos cuantos casuchos.
7
Unas setenta personas se apiñaban en las hediondas casuchas; eran mertanos, cuyo rey y nobles habían sido asesinados.