1
Hacía un día tempestuoso con vagos relámpagos, que brillaban entre dos nubes.
2
Era un día tempestuoso, con olas agitadas y coronadas de blanco.
3
Un día tempestuoso habría resultado más soportable que aquel día con el cielo encapotado.
4
Como aquella vez que la llevó a Dublín un día tempestuoso de febrero de 1821.
5
Solo tengo que dejar constancia de un incidente más en este día tempestuoso y melancólico.
6
El cielo se hallaba aún densamente nublado; pero el viento era alto: día tempestuoso y tonificado!
7
Al día siguiente fue el entierro, día tempestuoso y gris que arrojaba sobre Viena un verdadero diluvio.
8
Hacía un día tempestuoso cuando la invadió la necesidad de ir al parque del castillo de Charlottenburg.
9
Era un día tempestuoso de marzo.
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Poco tiempo después, ella fue a los acantilados de paseo con dos o tres soldados en un día tempestuoso.
11
Era aquel día tempestuoso (y decimos aquel día, porque no sabemos qué día era: solo sabemos que era un día).
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A pesar de que tuvimos días tempestuosos, el viento soplaba únicamente en una dirección.
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En los días tempestuosos, el hombre de las cavernas se sentía sombrío y acobardado.
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A mí también me gusta mirarlos, sobre todo en días tempestuosos... ¿En qué piensa?
15
En los días tempestuosos las olas parecían embravecidas y entonces hacíamos el camino por tierra.
16
Pasaron juntos cuatro días tempestuosos, pero, para el caso, lo mismo habría dado que hubiesen estado en Brighton.
