Era posible que la grosura del cristal lo hubiera evitado, aunque no podía estar seguro.
2
Abel, pastor de sus ovejas, eligió una de gran grosura y la sacrificó a Jehová.
3
Comemos grosura de ballena y tú hablas inuit.
4
Y te preparará mesa llena de grosura.
5
Él se señaló con un vago gesto el creciente de grosura que tensaba los botones de su chaqueta:
6
Caín, como era labrador, sacrificaba frutos y cereales, mientras que el pastor Abel ofrecía corderos y su grosura.
7
Estamos rodeados de demasiada grosura.
8
Y tus nubes destilan grosura.
9
Ni un pájaro ya deja ir una sola serial al gritar estrepitoso, aciados como están en sangre y grosura humana.
10
Me encanta el pescado, y para mí los días de ayuno son los de grosura, y los de vigilia, las fiestas.
11
Marmite aviva las candelas, prepara caldos, va de un lado a otro con más diligencia de la que su mucha grosura consiente.
12
La luz del recibidor de Roland hacía brillar la luz pintada y fotografiada en la reluciente grosura de la bola de cristal.
13
Cuando tú, ¡oh infinito!, me saques del foso profundo, hagan de mí lo que quieran aquellos que tienen forrado de grosura el corazón.
14
No obstante, como los sesos, pies, lenguas, bofes, asaduras, pajarillas, grosura, callos y demás despojos aguantan menos, es costumbre de venderlos y cocinarlos inmediatamente.
15
Aunque en su mayor parte eran rocosos y su suelo poco fértil, sus vacas eran famosas por la grosura y el sabor de su leche.
16
La voz de Beatrice tenía una grosura lanosa; vaciló, como hacía siempre, aduciendo una nube de lentas semiobjeciones, y al fin accedió, como hacía siempre.