Es tan cansador detestar a alguien que se ama.

Yo y mis hijas nos ofrecimos para sacarlo a pasear... "No, caminar es tan cansador...".

Es tan cansador, como ahora, hablar de mí mismo, qué siento, por qué hago lo que hago.

Si cualquier hijo en vida de Esaú ha tenido un día tan cansador como yo...

No solo fatigante, sino frío; la última persona que uno elegiría como compañero para un viaje tan frío y tan cansador.

Después de mi conferencia comí langosta entre dos señores almidonados y es tan cansador aburrirse que al volver al hotel subí directamente a acostarme.

Pero es tan cansador... esta noche fría y radiante, pero este viento descontento, que a ratos hasta parece cambiar la ubicación de aquellas acacias.

¡Nunca había habido allí nada tan cansador como esa interminable oda a Júpiter!