Con motivo de una provisión de curatos, cierto clérigo que vivía muy
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Y estos criados son los que salen para los mejores curatos.
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En 1719 el obispo Mimbela restituyó a los franciscanos sus curatos.
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Si lo acompañaba, era para cumplir con sus estrictos deberes religiosos en los curatos.
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Una buena parte está dedicada a los asuntos eclesiásticos, curatos, seminario, diezmos, relaciones con el obispo.
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Los curatos se distribuyeron entre frailes franciscanos, mercedarios y dominicos, con sujeción a los respectivos obispos.
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Funcionaban ya curatos de clérigos en Aguascalientes, real de Asientos, Ojocaliente y San José de la Isla.
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Durante la Colonia fueron los dominicos quienes se encargaron de administrarlo, junto con otros curatos y posesiones.
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Al ordenarse no había pensado Esteban ni un momento en pingües curatos, en prebendas descansadas, en capellanías aparatosas.
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La obra franciscana sufrió con la secularización de los curatos, dispuesta en 1712 por el obispo Camacho y Ávila.
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Las cofradías, los gremios, los curatos han impuesto en Cataluña tributos y privativas, llevando este abuso a un extremo increíble.
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Había estado echando de sus sedes o curatos a todos los clérigos de tendencias monofisitas a quienes Teodora había protegido.
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Cortes daban reglas para las oposiciones y concursos a curatos, y prescribían cómo habían de proveerse las parroquias y regularizarse las feligresías.
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Aunque la Iglesia constitucional se organizó, no pudo proveer todos los curatos y tuvo que dejar en su puesto a numerosos refractarios.
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Ocupaban los reformistas muchos curatos, y se les separo de ellos; oía el pueblo con fervor sus sermones; se les prohibió la predicación.
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Casi todas fueron transformadas en villas, permaneciendo sin embargo al cuidado de los franciscanos, hasta que el gobierno nacional secularizó los curatos en 1834.