Los españoles consideran a las mujeres como a un enemigo no beligerante, al que se puede robar y entregar al pillaje.

Ni uno se presentó, y los tres bandidos se entregaron al pillaje.

Cuando no se me permitía salir de ronda, me entregaba al pillaje.

Sus soldados se entregaron al pillaje, la destrucción y la violencia.

Algunos trabajadores, al borde de la inanición, se habían entregado al pillaje como bucaneros.

Sus casas habían quedado entregadas al pillaje, incendiadas o saqueadas.

Las tropas reales se entregaron al pillaje y al asesinato.

Señalé las diminutas figuras de los soldados entregados al pillaje.

Sus hombres se diseminaron entregados al pillaje, a las violaciones.

Sabe que la tropa se entrega al pillaje y a la barbarie más espeluznante.

Prohibió a sus guerreros que se entregaran al pillaje y robaran a los naimanos.

Según señalaron, se habían entregado al pillaje porque deseaban poder enviar cosas a sus hogares22.

Sabremos impedir que nuestros hombres se entreguen al pillaje.

Desertores, auxiliares, refugiados, todos ellos se entregaron al pillaje.

Y no hacía falta mucha imaginación para saber que, cuando pudieran, ésos se entregarían al pillaje.

Carcasona y sus habitantes serán entregados al pillaje.