Y cómprate unas gallinejas si te apetecen, que hoy es fiesta.

Le voy a traer ahora mismo una tacita de caldo y unas gallinejas.

En la buhardilla olía a gallinejas y a menstruación retenida.

Otro atracón de gallinejas y, ahora sí, llegó la paliza.

Hasta el pestilente olor de las gallinejas y los entresijos dejó de parecernos nauseabundo.

Donde antes se freían gallinejas y otras asauras hoy se cocinan alcuzcuces y comida china.

Echó a correr y un tiro le atravesó la vesícula, el intestino y las gallinejas.

De ese jaez era el acuerdo: tres alivios semanales a cambio de gallinejas, riñones o entresijos.

Adiós al solomillo, bienvenido el reino del pollo y del pollo se bajará directamente a las gallinejas.

Nada había que le gustara más que un buen plato de gallinejas, entresijos, mollejas y patatas fritas.

Me dieron una bolsa de virutas de porex con sabor a gallinejas que me supieron a gloria.

Las cocinas servían raciones de gallinejas y entresijos, de sangre frita encebollada y sardinas a la plancha.

Respiró hondo, el humo de las cocinas envolvía todo a olor a aceite requemado y gallinejas putrefactas.

Otra vez volvía a recuperar su entraña plebeya y recibía como un regalo exquisito las gallinejas que le compraba Samuel.

Piensa que son gallinejas.

Llegaba de lejos un fuerte olor de churros y de gallinejas, larvaduras de los animales, el verdadero cuajarón del cuajo.