Una de sus manos acarició sus húmedas braguitas, arrancándole gemidos de gozo.

Hace circulitos en las húmedas braguitas, presiona justo en el centro de mi sexo, sacándome otro jadeo.

Mientras se ponía las húmedas braguitas y buscaba el sujetador, comenzó a considerar si debía seguir con aquello unos días más.

Josette acaricia ahora las rodillas unidas, su mano asciende a lo largo de los prietos muslos y roza las húmedas braguitas...