Significados de humo hediondo en español

Salieron tres mujeres, mareadas, con arcadas y una nube de humo hediondo.

Se quedó mirándolo, con el extremo perfectamente segado y cauterizado, emitiendo un humo hediondo.

Llevó los labios a la boquilla y exhaló una impresionante nube de humo hediondo.

Las llamas quemaron el alquitrán y la grava del tejado produciendo un humo hediondo y sofocante.

Estallaron como bombas, crepitaron lanzando al espacio, nubes de humo hediondo y chispas, extinguiéndose pronto como cinco pajuelas.

Se alzó un humo hediondo.

Después, un humo hediondo salió a raudales de los agujeros que tenía en el torso y en la frente.

Una nube de humo hediondo, impregnado de resina, que cortaba la respiración, comenzaba a abatirse sobre la pequeña patrulla.

Era ya día claro, pero ardían aún antorchas de madera de pino untadas de pez, que despedían un humo hediondo.

Se despertó de pronto, en medio de grandes estornudos y arcadas, los pulmones llenos con el humo hediondo del estiércol quemado.

Lo que había quedado de la vieja casa había acabado de ser arrasado, desventrado, incendiado, y emanaba todavía un humo hediondo.

No solo había penetrado con profundidad en el estómago de la methuselah, sino que de la herida se levantaba un humo hediondo.

La sombra del capitán ardió dos días, contribuyendo a formar la columna de humo hediondo que incluso hizo callar a los cañones enemigos.

En él los condenados colgaban por la lengua de árboles ígneos, los impenitentes se abrasaban en hornos y los infieles se asfixiaban en humo hediondo.

Estiércol de vaca quemado en un brasero para ahuyentar a los zancudos y de estoraque para contrarrestar el humo hediondo con el perfume del liquidámbar.

La habitación, saturada de humos hediondos, olía a tomillo y cebollas.