Los relatos periodísticos decían que el comodoro Maynard había caído en un lugar donde no llegaba la marea alta.

Acercábamos las sillas, nos acurrucábamos en el asiento y dormíamos, le cogíamos la mano y enseguida llegaba la marea.

Una ancha franja, a lo largo de su mitad más baja, señalaba el nivel a que llegaba la marea alta.

-No-contestóNab- ,comenzabanen el sitio donde llegaba la marea, porque entre este sitio y los arrecifes las huellas debían haber sido borradas.

"El semisumergible se armaba en una plataforma y luego, cuando llegaba la marea alta, simplemente lo deslizaban de la plataforma por una rampa al río".