Las negociaciones progresaban muy lentamente y Otón las rompió de pronto invadiendo las provincias bizantinas de la Italia meridional.

Pero no podemos olvidar que parte de las plazas afectadas, Amalfi y las islas de Córcega y Cerdeña, son provincias bizantinas.

El condado de Trípoli y el principado de Antioquía resistían aún, gracias a la proximidad de las provincias bizantinas de Asia Menor.

Cartago Nova ha elevado sus muros varios palmos desde que nuestro señor, el rey Leovigildo, comenzó a atacar de nuevo las provincias bizantinas.