Significados de transatlánticos de lujo en español

Martin recorrió el mundo en avión y transatlánticos de lujo.

A la derecha, frente a un pequeño canal, hay amarrados tres transatlánticos de lujo.

Poseemos transatlánticos de lujo, pero no tenemos un yate propio para navegar en la Riviera.

Además, tampoco había muchos puestos para capitanes de transatlánticos de lujo, ni siquiera para los valientes.

Pecuniaria y moralmente se trasegaba el rudo trabajo en las cubiertas de los transatlánticos de lujo.

Las únicas pinturas de la habitación eran de barcos: clípers americanos y algunos de sus transatlánticos de lujo.

Dejaron atrás la isla y sobrevolaron el transitado estrecho de Georgia: transatlánticos de lujo, ferries, cargueros y yates privados.

Por ejemplo, era difícil creer que todas las vajillas de cristal que vendía procedían de comedores de transatlánticos de lujo.

Sobre estos siete temas se han escrito suficientes libros como para hundir con su peso una flota de transatlánticos de lujo.

Hace tan solo diez años, apenas tres transatlánticos de lujo cubrían la ruta del Atlántico Norte, desde Europa al Nuevo Mundo.

El mismo de todos los transatlánticos de lujo, aunque el mar de sus ventanas sea de asfalto y sus peces transeúntes.

Y antes de 1914 era habitual la pileta a bordo de barcos transatlánticos de lujo, como el Imperator de la compañía Hamburg Amerika.

Un plazo escrupulosamente observado por los transatlánticos de lujo, cuyo pasaje desembarca por legiones para contraer exóticos matrimonios o entregarse a las compras.

Algo por el estilo se ha conseguido ya parcialmente en los más espléndidos salones de baile, cines, hoteles, restaurantes y transatlánticos de lujo.

También había teléfonos normales por todo el avión, y al igual que en algunos transatlánticos de lujo se podía llamar a cualquier parte del mundo.

Transatlánticos de lujo, cargados de almas, escribió el poeta Auden: proas de piedra.