Fue algo así como si hubiese pisado un baño de plomo tundido.

Sus ojos marrones de plástico tundido parecían no pertenecer a un ser vivo.

Aquí me han tundido el paquete y esto no marcha.

Fue recibido por el mayordomo que había tundido a Saulo.

Después, la puerta de seguridad explotó con una lluvia de fuego y acero tundido.

Hasta dejarle el cuerpo tundido, desbaratado, y los labios partidos.

No estaba para buenos modales ni nadie los había tenido conmigo al verme tundido.

Al antiguo picador de Peñalmonte lo habían tundido a palos los matones de don Fausto.

Su piel era oscura y suave como chocolate tundido.

Al menos aquel día radiante no llevaba sombrero para proteger del sol su cráneo bien tundido.

Aunque tundido y maltrecho, Venters tuvo un momento de alegría, porque había logrado ocultar completamente sus huellas.

Nuevamente intentó protestar Bunch, pero sentíase tan mareado y tundido que por fuerza hubo de estarse quieto.

Chemari se aleja cabizbajo y tundido.

Lentamente fue recuperando su sangre fría, lo mismo que cuando allá el Gorila le había tundido a golpes.

Herido, raspado, tundido a golpes, mi cuerpo vibraba, y a cada nuevo martillazo mis entrañas magulladas parecían romperse.

En aquellos tiempos debía ofrecer un aspecto extremadamente inane, parpadeando, inmóvil, como si algo le hubiese tundido la cabeza.