1
Yo te conjuro, ánima bendita, para que dejes este mundo y te tornes al tuyo.
2
El hijo... Un hijo no se vende, ¿verdad que no, ánima bendita?" Marcela bisbisea un fantástico diálogo.
3
Pero tú, ánima bendita, encuentras hermosa mi casa y encima preguntas si estoy sola y luego te sorprendes de que me ría.
4
Hoy en este mundo y mañana en el otro; hoy, de carne y hueso, y mañana, con los ángeles, hecho un ánima bendita.
5
Tal y como se lo anunció por la noche el ánima bendita de su difunto padre, que hacía lo menos 20 años que estaba muerto.
6
Allí está, frente a él, La Cripta del Ánima Bendita y sigue cubierta de flores y de retablos.
7
-Comola finada mi madre, ánima bendita.
8
-¡Oh ,ánimabendita del purgatorio!