Allí permanecía primero con aire alelado contemplando los juguetes que le rodeaban.

Obtuvo su carta, que el párroco escribió con el mismo aire alelado.

Con aire alelado, todavía incrédula, Clara contempla su brazo redondo y blanco.

Los invitados, con aire alelado, desorientados, se fueron levantando uno tras otro.

Él sonrió con aire alelado, como si fuese un muñeco de trapo.

En ese momento entró Grover, trotando y sonriendo con aire alelado.

Se le acercó con aire alelado y se abrazó a ella.

Pero súbitamente me detengo y miro con aire alelado ante mí.

A veces, abres desmesuradamente los ojos y miras las cosas con aire alelado.

Ese aire alelado la vuelve más encantadora aún a tus ojos.

Se quedó mirando a Lucien con aire alelado cuando regresó junto a ella.

Schmucke miró a aquel hombre con el aire alelado que había tenido respondiendo a Rémonencq.

El truhán miró al rey moviendo los brazos de un lado a otro con aire alelado.

Armand, desde el centro de la habitación, se volvió hacia los dos hombres con aire alelado.

El doctor Mannfried tomó un fragmento que había entre mis cabellos, y dijo con aire alelado:

Se fue, mascullando con un aire alelado: