1
Mary cerró los ojos para no verla señalando un arbusto de cornejo y diciendo: "¡Mira mamá!
2
El grupo reinició el cauteloso reconocimiento del bosque y, más tarde, fue Ohilin quien encontró, abandonada en un arbusto de cornejo, una bolsa de piel.
3
Había varios arbustos de cornejo.
4
Estaba bordeado, todo él, a ambos lados, por arbustos de cornejo, boj y arriates de pensamientos azules y amarillos.
5
Era un hermoso día de junio y por toda la vecindad los arbustos de cornejos estaban cargados de espléndidas flores.