Al terminar, tras una auténtica tortura entre estertores y temblores, estaba agotaba.

Yo te lo diré: ha sido una auténtica tortura -sentenciécon énfasis-

Con nuestros teclados numéricos prehistóricos, escribir un SMS era una auténtica tortura.

Vagar de noche por las calles de Perla era una auténtica tortura.

Para ella era una auténtica tortura estar conmigo en la misma habitación.

Sin embargo, la espera era una auténtica tortura para él; no aguantaba más.

Se había visto forzado a observar cómo le asesinaban; una auténtica tortura emocional.

Tener por fin derechos inalienables y no poder ejercerlos era una auténtica tortura.

Un problema con once movimientos es una pura y auténtica tortura.

El tratamiento diario con yodoformo supuso una auténtica tortura para Klara.

De hecho, las conferencias de prensa le resultaban una auténtica tortura.

Esperar mientras se celebraban las carreras preliminares era una auténtica tortura.

Encontrarse en el extranjero en tal estado es una auténtica tortura.

Aquellos meses tuvieron que ser una auténtica tortura para mi abuela.

Y durante estos días calurosos que hemos pasado, ha sido una auténtica tortura.

En Valencia, el Cid era una auténtica tortura para los musulmanes.