Emitió un gemido y se lanzó en plancha hacia su todoterreno, casi sollozante.

La respiración de Eve era sibilante ahora, casi sollozante, pero no se detuvo.

Su voz era casi sollozante y llena de preocupación.

Apretaba convulsivamente las manos y ella emitió un tenue grito, antes de inquirir casi sollozante:

Luego, la voz del hombre, como rota, casi sollozante.

Pedro, más blanco que el pañuelo que tenía en la mano, exclamó entre temblores, casi sollozante:

Mary no se apartó, pero se arrimó a mí y su respiración era anhelosa, casi sollozante.

Doña Dolores decía esto acongojada, casi sollozante.

La infeliz señora, llenos de lágrimas los ojos, casi sollozante, se detuvo, secó su llanto, y prosiguió:

Y cuando oyó su voz casi sollozante, añadió- :Hablaremosen otra ocasión; ahora tengo que ir a casa.

Con voz casi sollozante, grité:

Sabía que lo que iba a suceder nos separaría para siempre -lavoz de Leser era quebradiza, casi sollozante-

Se terminó, murmuró casi sollozante, se terminó, José Mari, me lo habías prometido, lo habíamos decidido, querernos solo por nuestra cuenta.

Con un supremo esfuerzo, aun a pesar de estar paralizado por el miedo, Thierry preguntó con un hilillo de voz casi sollozante:

Una conmoción nerviosa sacudió su cuerpo, inclinó la cabeza a tamaña pesadumbre y, cubierto el rostro con ambas manos, murmuró casi sollozante:

Casi sollozante, volvió a dejar la Biblia sobre el velador.