Aunque nos hemos liberado del feudalismo, el caudillismomilitar y la Iglesia, nuestros problemas son, esencialmente, los mismos.
2
Esta derrota produjo, a la larga, una reacción saludable, pues hirió de muerte al caudillismomilitar, encarnado en el dictador Santa-Ana.
3
Oponernos al caudillismomilitar, y pronunciarnos por la democracia dentro de ciertos límites y por la disciplina militar fundada en la autoridad.
4
En todos los casos, el pueblo fue víctima del caudillismomilitar que, después de ilusionarlo, hacerlo participar y sacrificarse, degeneró en varias dictaduras.