1
Dicen que ayer mismo a unos alemanes les sacaron doscientos chervonets.
2
Y además, precisamente ahora, que me encuentro en estado y necesito por lo menos ocho chervonets.
3
Te aseguro que me resulta muy duro lo que estoy haciendo, pero... ¡dame cien chervonets y seré tuya!
4
Después añadió un chervonets de propina y lo entregó todo al camarero mientras murmuraba: "Firme, por favor".
5
Regáleme cuatro chervonets, para empezar.
6
Vánechka sacó del bolsillo cuatro chervonets, pero pensándolo mejor sacó otros dos y se lo entregó todo a Murka.
7
La caterva de excelentes muchachos fue la que resultó más costosa, pues hubo que repartir a dos chervonets por barba.
8
En cambio en provincias, si uno tiene cinco chervonets de más en el bolsillo, es un héroe, un potentado, un rey.
9
Con el gorro en una mano y doce chervonets en la otra, no podía dar un solo paso: tal era su asombro.
10
Igualmente, el chervonets, que debía ser la sombra estable de los precios firmes, no fue más que la sombra de sí mismo.
11
Los lentes se escurrían de su nariz, colorada y sudorosa; los naipes y los chervonets pasaban por sus manos, llenas de grasa y mugre.
12
Dicen que ayer mismo a unos alemanes les sacaron doscientos chervonets.
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Y además, precisamente ahora, que me encuentro en estado y necesito por lo menos ocho chervonets.
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Te aseguro que me resulta muy duro lo que estoy haciendo, pero... ¡dame cien chervonets y seré tuya!
15
Después añadió un chervonets de propina y lo entregó todo al camarero mientras murmuraba: "Firme, por favor".
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Regáleme cuatro chervonets, para empezar.