Tres de los comandantesargivos estaban ahora fuera de combate, y al salir los tres del frente, sus hombres perdieron fuelle.
2
Paris detuvo su carro a unos cincuenta metros de los comandantesargivos, pero Héctor se acercó más, con su empenachada cabeza bien alta.
3
Pero recordó el otro sueño; volvió a ver a los comandantesargivos trepando al interior del cuerpo del caballo sacrificado a Poseidón, que habían reconstruido.