Y tú contrólate, no es tan fiero el león como lo pintan.

Se insultó entre dientes: contrólate, nenaza patética, ¿y tú te consideras soldado?

No, María, contrólate que es Quique, el simpático, divertido y guapísimo Quique.

Vamos, contrólate..., eso no sucedió, solo fue parte de tu pesadilla.

Venga, contrólate, ¡Por el amor de Dios, no te marees ahora!

Tiendes mucho a ello y luego te cuesta llegar a fin de mes, contrólate.

Mujer, contrólate y responde a mis preguntas como es debido.

Por favor -ledecía con los ojos- ,porfavor, contrólate, no montes el numerito.

Y tú, hermano, contrólate, pues las palabras precipitadas son ahora más peligrosas que nunca.

Cálmate, Marcela, contrólate, le pedía mi madre, en tono fuerte.

Estás bien, muy bien, pero contrólate un poco, ¿quieres?

Pero te lo pido por última vez: contrólate.

Te lo suplico, contrólate y recuerda la dignidad.

Ahora, contrólate un poco, y recuerda el consejo que me diste de no pensar en eso.

Cuando subía en el ascensor, Adam se dijo en voz alta: "Venga, tío, contrólate".

Sí, había trabajo que hacer, contrólate, Al-vin Miller.