1
Pero no viniste a escuchar mis lamentos, sino a conocer mis últimos poemas.
2
Sin embargo, no has venido a escuchar mis lamentos.
3
Claro que tú no has venido hasta aquí para escuchar mis lamentos, sino para hablar con Magín.
4
Tú no paras de escuchar mis lamentos.
5
Debora Messina, amiga del alma, por leer borradores sin fin, escuchar mis lamentos y estar siempre allí.
6
No eres un residuo histórico, sino una madre demasiado indulgente, como tantas otras -medijo Gorka después de escuchar mis lamentos.
7
No estáis aquí para escuchar mis lamentos...
8
Por fin descubrí en el profesor Netřesk a la persona dispuesta a escuchar mis lamentos y a darme algo así como una absolución.
9
Sus raíces han escuchado mis lamentos de adolescente y mis dudas existenciales.
10
Y él escuchaba mis lamentos con una atención consoladora.
11
Es una compañera fiel y leal, que escucha mis lamentos, mis alegrías y mis cavilaciones.
12
Ella es mi guía, me dice lo que he de hacer, escucha mis lamentos, me reconforta.
13
-¡Lejos de mí vosotros, malhechores, que el Señor ha escuchado mis lamentos!
14
-Perousted no ha venido para escuchar mis lamentos.
15
-Peroseguramente el príncipe tendrá otras cosas que hacer que escuchar mis lamentos, y mis pacientes me esperan...
16
Recibe mis cálidos suspiros, escucha mis lamentos íntimos y familiares, ten un poco de benevolencia, atiende a un súbdito tuyo tan fiel y manso.