La nuez se endurecía cada vez más: brillaba ya como frutaensazón.
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Por " frutaensazón" se entendía, con toda seguridad, "kakis maduros".
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La otra, aquella Mari-Ele, bella y sana como frutaensazón, poseía un conjunto de grandes perfecciones.
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La frutaensazón es más apetecible.
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Era una guapa hembra, sana como una jaca de raza, y a punto, como una frutaensazón.
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El de la frutaensazón que sublima el eslógan que acuño por si el tiempo lo respeta.
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Después de cumplir bien con su oficio, los dos se bañaban, comían, bebían e iban a coger frutaensazón.
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Sin embargo, tenía la madurez de la frutaensazón, a punto para ser recolectada, a la espera de ser comida.
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Grato el cantar de las cigarras, deleitoso el balar de los corderos, dulce el ambiente perfumado por la frutaensazón.
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La emperatriz salía todos los días a los jardines y mostraba el interés de siempre por toda flor y toda frutaensazón.
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Verdad era que estaban en otoño, en una ciudad intacta, maravillosa, con una mujer que olía a limpio y a frutaensazón.
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Pero siempre acababa por entrar al caserío, donde le aguardaba Sara, fresca y sonriente, al aire sus carnes rosadas de frutaensazón.
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Con candidez admiraba un hermoso ciruelo cargado de frutaensazón, y como es lógico, apetecía la fruta y le pedía con palabras tímidas.
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Tiempo después afirmaría que él se había limitado a apoyarse en el árbol y que la frutaensazón había caído por su propio peso.
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Pero era de espaldas cuando se apreciaba mejor su opulencia maciza, brava, mareante, como de frutaensazón, esperando que alguien la arrancase del árbol.
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Por lo que nos contaba el dueño, para lograr esta " frutaensazón" solo sirven estos kakis de Mino, que tienen la piel resistente.