Hay una persona con grandes hematomas en la cara y en el cuerpo.

Le temblaban las piernas, notaba cómo se le formaban grandes hematomas en las rodillas.

Su ceño se frunció hoscamente ahora, al ver los grandes hematomas producidos por las balas.

Tenía la cara hinchada, con grandes hematomas de diferentes tonalidades de amarillos, verdes y marrones.

Sus ojos eran dos esferas inyectadas de sangre, rodeadas de grandes hematomas que cubrían casi todo el rostro.

Al muchacho se le habían comido en parte los ojos y tenía grandes hematomas en la mandíbula y el mentón.

De milagro no me fracturé nada pero si terminé con raspones y grandes hematomas en las piernas, cuerpo y brazo.

Al día siguiente, tenía dos grandes hematomas en forma de manos donde sintió el empujón, como si la hubieran presionado fuertemente.

Eso explicaría, según su versión, los grandes hematomas en los gluteos que presentaba cuando fue examinada en un hospital de Sao Paulo.

Cuando examiné sus piernas vi que tenía grandes hematomas y le pregunté si había tenido alguna caída o había sufrido un golpe.

Eso justificaría, según su versión, los grandes hematomas en los gluteos que la mujer presentaba cuando fue examinada en un hospital de Sao Paulo.

El informe médico tenía catorce páginas, la paciente presentaba un traumatismo abdominal con afectación esplénica, hepática y renal, en la piel se apreciaban grandes hematomas.

Grandes hematomas que no se podían tapar con maquillaje.

Grandes hematomas, que brillaban húmedos bajo la luz halógena de los focos, cubrían su torso.

-Las heridas están rodeadas por grandes hematomas; espaciadas de forma uniforme y separadas por unos cuatro centímetros.