Al apartarlo se encontró la palma cubierta de granitos de azúcar.

Masqué lentamente, los granitos de azúcar me rechinaban hasta la frente.

Thomas dibujó un círculo con los granitos de azúcar antes de volver a mirarme.

Toma otro sorbo y puedo oír los granitos de azúcar crujiendo entre sus dientes.

Me tomo un buen sorbo y los granitos de azúcar crujen satisfactoriamente entre mis dientes.

Después saborea los granitos de azúcar que se han quedado en el fondo y los mastica.

Después se frotó las pequeñas y enguantadas manos y varios granitos de azúcar cayeron sobre la hierba-

Joona escuchó distraído la conversación mientras iba picoteando los granitos de azúcar perlado de su bollo de canela.

Quedarán los granitos de azúcar.

Con los labios manchados de granitos de azúcar y almendra machacada, comían igual que hablaban, lenta, ruidosamente y sin parar.

Como si hubiera leído mis pensamientos, apoyó los codos en la mesa, chupó unos granitos de azúcar de su dedo índice y volvió a mirarme.

El otro dejó de recoger con el dedo los granitos de azúcar esparcidos alrededor de la taza vacía y se acarició instintivamente la sien izquierda.

Sus manos hacían rodar, deslizarse, rechinar los granitos de azúcar sobre el liso papel: "Esto me recuerda a Arcachon cuando leía en la playa".

-Retiróunos granitos de azúcar del platillo con la yema del dedo-

"¡Mis pequeños azucarillos!", dice, o "mis granitos de azúcar", o "mis diminutos"...