1
Y sentí, en mi rostro, el húmedo relente de una desconocida noche.
2
La luna cabrilleaba sobre el río y de él subía un húmedo relente.
3
El húmedo relente de la noche les alcanzó.
4
Brillaban las primeras estrellas de la tarde y el calor del día cedió a un húmedo relente, bajado del bosque.
5
Salió al patio y se arrebujó en su manto de pieles al sentir el frío y húmedo relente de la noche.
6
Mientras el húmedo relente del otoño enfriaba su frente, el jefe de seguridad del cónclave tuvo tiempo de meditar sobre muchas cosas.
7
Pues ¿y prestarlo a una señorita a la salida de un baile para que preserve su encantadora cabeza de] húmedo relente de la noche?