Meanings of hombrada in Spanish

Tampoco advirtió que muy en breve su fanfarronada se convertiría en realidad.

Sería un error no ver en estas palabras más que una fanfarronada.

Regis tuvo que reconocer que la afirmación no era una simple fanfarronada.

Acaso lo que le digan sea fanfarronada, aunque también podría ser cierto.

Y su ataque no provocado ha sido, en opinión mía, una fanfarronada.

Mientras decía estas palabras fue consciente de que eran una pura bravuconada.

Bien: piensan que es un simple alarde, una bravuconada de la República.

Os aconsejo que no toméis en cuenta, de ninguna manera, semejante bravuconada.

Su política empezaba a ser una bravuconada, una insostenible huida hacia delante.

La primera carta no es más que una bravuconada, fuegos de artificio.

El objeto de su baladronada estuvo lamentablemente mal en su primera intervención.

Sus palabras no eran una baladronada, sino un hecho evidente para cualquiera.

Augusto escuchó sin replicar esta baladronada; porque él llevaba un determinado propósito.

En tal revelación no alienta un fatuo espíritu de baladronada o desafío.

De manera que había pasado de su baladronada para confiar en él.

Yo le había replicado con una buena machada y me había colgado.

Tuvo que escoger entre esperar a que hubiera transporte o hacer la machada.

Es la clase de machada que se le habría podido ocurrir.

Fue una auténtica machada, si me permites hablar en estos términos.

Una semana faltaba para rematar los tres meses desde la machada de Yaqub.

Estoy hablando de la valentonada de hacerte pasar por la quilla.

Esa es la verdadera cobardía disfrazada de valentonada.

Siempre había algún interno que soltaba una valentonada.

No empieza con un acto -eltípico amago de beso o una valentonada- ,sinocon una pregunta.

Algunos días después, Tadek hizo una valentonada que me sacó tanto de quicio que lo habría estrangulado.

No seas ojete, dijo con la grosería valentona que ya le conocía.

Paúl y Angulo, con valentona jactancia, se recuesta en la barrera encendiendo un cigarro:

Doña Pom se fue en un vapor, curándose el hígado, curada de espantos, loca de atar, valentona y jacarandosa.

Consiguió encontrar dentro de sí la osadía valentona necesaria para esbozar una sonrisa forzada y alzó la mano para indicarles que se detuvieran.

Estaba seguro de que jamás la había visto antes y, sin embargo, había algo vagamente familiar en su voz y en su valentona actitud.