Aunque también me avisó de que es un hombre timorato y poco decidido.

Pero nada nos hace sospechar que los tuviera aquel hombre timorato y melancólico.

Sintió una oleada de afecto hacia aquel hombre timorato.

El cónsul era un hombre timorato que ocultaba sus susceptibilidades tras una elegancia espontánea y sutil.

Es un hombre timorato y también ha callado.

En realidad, no era un hombre timorato.

Lo que no puede decirse, visto el percal, es que José Aranguren padre fuera un hombre timorato.

El Chino, hombre timorato, abrumado por tanta hostilidad, acabó por ponerse el bañador, pero su madre no.

El padre Hagan no era un hombre timorato, pero vivir sobre un cementerio tenía que hacer su efecto.

Clive Folliot no era un hombre timorato, pero hacía tiempo que había aprendido que las emociones nunca mueren.

No quería acabar siendo un hombre timorato como mi padre, y menos todavía acabar medio loco, como mi madre.

Jesús lo acogió complacido, pero halló que era un hombre timorato y que más le serviría como un discípulo oculto que manifiesto.

Alberico es un hombre timorato, hundido hasta el cuello en sus propias redes, que lo único que ambiciona es la tiara de emperador.

De hombres timoratos, de hombres que creen solo lo que les obligan a creer y que solo piensan lo que les obligan a pensar.