1
Creo que en este pozo es McAsh, el joven alborotador.
2
Este joven alborotador del bigote rubio es Darax, y aquel cuya nariz rasca el cielo es Bareint.
3
El joven alborotador llamó al amo del hotel, que se presentó vestido de punta en blanco y le dijo a éste:
4
Quizá deseaban verse libres del joven alborotador, que había profesado puntos de vista calvinistas y había defendido a Copérnico en un debate público.
5
Pero una parte de mí todavía seguía optando por el deber por encima del deseo, de modo que mantuve a raya al joven alborotador.
6
Aquellos jóvenes alborotadores no tenían culpa; pero sus padres y profesores sí.
7
Los reincidentes le desagradaban aún más que los jóvenes alborotadores y los atracadores.
8
Los jóvenes alborotadores, capitaneados por Osvaldo, se plantaron en el umbral.
9
Fue una jornada desquiciada por culpa de aquellos jóvenes alborotadores.
10
Días después, si el afilador encontraba a cualquiera de los jóvenes alborotadores, les decía:
11
Esto no puede continuar, de un momento a otro la ley perseguirá a estos jóvenes alborotadores.
12
Los dos jóvenes alborotadores habían provocado momentos de un caos extraordinario en el castillo de Middleham.
13
Hombres, mujeres y niños salieron a recibirlos atraídos por el ruidoso festejo de los jóvenes alborotadores.
14
Unos pocos eran mujeres, unos pocos hombres viejos, pero en su mayor parte eran clásicos jóvenes alborotadores.
15
En la segunda, unos policías asimismo maduros y también vestidos de azul, destripaban a inocentes jóvenes alborotadores.
16
Desde las localidades altas los jóvenes alborotadores lanzaron octavillas sobre el patio de butacas, en las que se leía: