1
Después, a iniciativa propia, me invitaron a pronunciar el juramento de Hipócrates.
2
Pero lo que hacemos es que nos apegamos al juramento de Hipócrates.
3
Pedro Losantos conocía el juramento de Hipócrates, que no siempre había cumplido.
4
Y el juramento de Hipócrates se fue a los cestos de basura.
5
Además, mantiene el juramento de Hipócrates hasta en sus menores detalles.
6
El juramento que prestara, el antiguo juramento de Hipócrates, ¿qué aplicación tenía aquí?
7
No he faltado a mi juramento de Hipócrates, pero lo he guardado en un cajón.
8
Lo que usted hizo estuvo muy mal, amén de que viola el juramento de Hipócrates.
9
Ese hombre creía verdaderamente en su juramento de Hipócrates.
10
Eso sí, necesitabas un médico que se pasara el juramento de Hipócrates por el mismísimo siete.
11
Señores, repitamos juntos el juramento de Hipócrates.
12
El juramento de Hipócrates, y todo eso.
13
En las facultades de medicina soviéticas no se enseñaba el juramento de Hipócrates, pero ella lo había leído.
14
Se condena a los héroes y se premia a los cobardes incapaces de cumplir con el juramento de Hipócrates.
15
Del juramento de Hipócrates, que se exige de todos los médicos antes de entrar en la práctica de su profesión.
16
El juramento de Hipócrates.