El primero en llegar al tanatorio fue Eduardo, el pequeño de los hermanos.

Al llegar al tanatorio, vi una larga lista de nombres.

Tenemos que llegar al tanatorio por nuestro propio pie.

Al llegar al tanatorio, nos descargaron como a ovejas.

Al llegar al tanatorio me he encontrado a unas trescientas de la especie, todas llorando.

Lo que pasa es que vamos a llegar al tanatorio, y ahora mismo no va a poder ser.

Miro en Google cómo llegar al tanatorio y descubro que tengo que tomar varios medios de transporte: metro, cercanías, taxi.

No recordaba el nombre de su padre, así que, al llegar al tanatorio, pregunté en recepción por el apellido de Sonia.

Si esta mañana se acercaba al hospital Carlos Solchaga, el primero en llegar al tanatorio ha sido Jose María Aznar, expresidente del Gobierno.

Si no llegaba al tanatorio, estaba a las once en el cementerio.

Cuando llegué al tanatorio, encontré a mi madre enlutada en las escaleras.

Cuando llegaron al tanatorio, la familia entera de Manolo estaba allí.

Cuando llegamos al tanatorio, contra todo pronóstico, nos recibió solícito un amable patólogo.

A primera hora de la mañana, los reyes Simeón y Margarita llegaban al tanatorio.

Pedaleando y tras haber consultado un plano, llegué al tanatorio.

Para cuando llegó al tanatorio, el servicio ya había comenzado.