Cualquier intento de arrancarle información activaba un reflejo condicionado de mudez total.

Luego la mudez total, sin que nadie se atreviera a levantarse.

Hay que cortar los dos nervios para conseguir una mudez total.

Estaba preso de una mudez total como no le había pasado en la vida.

Abrió la boca sonriente, y tenía aquella mudez total; si quisiese expresar su alma, ladraría.

Nuevamente, una mudez total envolvió la conversación.

Aunque el silencio no tuviera lugar por los cancaneos de la maquinaria, se experimentó una mudez total durante las casi dos horas de viaje.

"Elenita", le dije mientras la acariciaba, "eso es la muerte: la quietud total, la sordera total, la mudez total.