1
Cuando era joven, siempre me había atraído la parábola del hijo pródigo.
2
Pero ni siquiera padre puede negar la parábola del hijo pródigo, ¿verdad?
3
Me siento como el hermano mayor de la parábola del hijo pródigo.
4
Un magnífico ejemplo a seguir se ilustra en la parábola del hijo pródigo.
5
Además, es privativo el relato de la parábola del hijo pródigo.
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Y es el único que narra la parábola del hijo pródigo.
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Solo que Él llama parábola a su historia, la parábola del hijo pródigo.
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Incluso puede que os ame más, tal como indica la parábola del hijo pródigo.
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La lección de la semana pasada estaba basada en la parábola del hijo pródigo.
10
La parábola del hijo pródigo y la de la dracma perdida, enseñan la misma lección.
11
Se trataba del pasaje del evangelio de Lucas que narra la parábola del hijo pródigo:
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Aún lloro -¿sabes? -leyendola parábola del hijo pródigo.
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La utilidad de la parábola del hijo pródigo es limitada, pero tampoco está de más recordarla.
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Pero que nadie espere en esta parábola del hijo pródigo reencuentros amables ni postales de felicidad.
15
Es como en la parábola del hijo pródigo.
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Entonces la abadesa le dijo que era bienvenida y se remitió a la parábola del hijo pródigo.
