Sin embargo, hay que reconocer que suele quedar un residuo de envidia.

Quizá le quede un residuo de una docena o así de muertes.

Quedaba un residuo en el cristal, una sustancia de un rojo intenso.

A falta de nuevos inmigrantes queda un residuo de ancianos endebles y achacosos.

Pero siempre queda un residuo, por así decirlo, a nuestro alcance.

Pero a mí me queda un residuo de interés, podría decirse.

Después de que el agua se evaporaba quedaba un residuo orgánico.

La tinta se borra, pero supongo que queda un residuo mágico.

No obstante, después de la evaporación de la fe de Clara, quedaba un residuo.

Mientras le quedase un residuo de conciencia, le quedaría voluntad.

Había perdido el entusiasmo salvaje de otros tiempos, la adrenalina, pero quedaba un residuo.

A Hécuba aún le quedaba un residuo de miedo supersticioso.

Verá que queda un residuo cristalino blanco, que casi parece sal o azúcar, llamado potasa.

Cuando terminó su bebida solo quedó un residuo rojo en los lados de la botella.

En el aire quedaba un residuo de olor a garbanzos hervidos y a tocino rancio.

Tan solo quedaba un residuo de mi pasión física no correspondida..., una exasperación entre nosotros.