Falk pensó en una rana mugidora de piel flácida y vejiga hinchada.

Parece una rana mugidora -ledije a Mezaki, pero no me respondió.

Una rana , respondo, y salto como una rana , una rana mugidora.

Probablemente no podía distinguir ni un acento austriaco del croar de su propia rana mugidora.

Su rostro hacía pensar en una rana mugidora fatigada.

Marsali tenía razón: parecía una rana mugidora estreñida.

Krantz encendió una cerilla y los ojos metálicos de una rana mugidora brillaron entre los desperdicios.

Tosí; me salía voz de rana mugidora-

La rana mugidora no dejaba de croar.

Al acercarse Randall, una rana mugidora saltó del bordillo y echó a nadar hasta ponerse a salvo.

Gritaré con una gran voz como un león rugiendo contra un puma, como una rana mugidora en celo.

Una rana mugidora pasó volando, y fue capturada de inmediato por el ave cefalópoda posada sobre la rama.

Está un poco cansado de no dormir bien, pobrecito, y tiene una garganta que parece una rana mugidora estreñida.

Su voz sonaba como la de una rana mugidora que fumaba una media de tres paquetes de cigarrillos al día.

Fue el ver a todos esos griegos vestidos de mujer, y Pompeyo sentado allí como una henchida rana mugidora con su toga de triunfador.

-Bueno-suspiróNappy, que parecía una rana mugidora sentada en la parte trasera del coche.