Volvió a respirar con naturalidad.

La ilusión duró solo una fracción de segundo, y luego el hombre que esperaba volvió a respirar con naturalidad.

Si no fuera porque el agua que le caía en la cara le impedía respirar con naturalidad, se habría quedado dormido allí mismo.

Bajó la escalera a saltos y cuando se dio cuenta estaba en la calle intentando sobreponerse, respirar con naturalidad y caminar como los demás peatones.

Deja que la energía se expanda mientras descansas, respirando con naturalidad.

Respiraba con naturalidad y fingía distraerse con la contemplación del paisaje.

Respiró con naturalidad, relajó los músculos del rostro, sonrió y dijo:

Respiras con naturalidad y dejas que el Chi se mueva a su aire.

Había estado respirando con naturalidad, pero cuando inhaló esta vez, no pudo contenerse.

El pequeño respiraba con naturalidad, pero el ronroneo de su pecho seguía allí.

Iba templándose, respirando con naturalidad, hasta que sintió el asomo de un escalofrío y salió del exiguo garito.

Descansa y respira con naturalidad.

Pero, las drogas, el barrio, las calles y la estupidez que flotaba en el aire y respirabas con naturalidad pudieron con él.

Así que no levantó ni balanceó, ni respiró con naturalidad, sino que arrastró y tiró, y llegó a la habitación norte bufando como una orca.